Cabeza de la manifestación contra la violencia machista celebrada el 9-N
El pasado 7 de noviembre se celebraba en Madrid la Marcha Estatal contra la Violencia Machista, convocada por más de 400 colectivos feministas de toda España, en la que se exigía que la lucha contra la llamada violencia de género fuera “una cuestión de Estado”.
En esa manifestación, decenas de miles de personas, según los organizadores de la misma, recorrieron las calles del centro de la capital desde el Paseo del Prado a la Plaza de España pasando por las calles de Alcalá y la Gran Vía.
Entre los asistentes a la manifestación se pudo ver al líder del PSOE, Pedro Sánchez, que acudió justo antes del inicio de la marcha. “Hoy quiero reivindicar la memoria de las más de 800 mujeres asesinadas, pero también a los niños que se han quedado huérfanos o han perdido la vida a manos de las parejas o exparejas de sus madres”.
También hizo acto de presencia en la misma el líder de Podemos, Pablo Iglesias, quien destacó que la manifestación no debía tener un carácter partidista, pero que “tiene que quedar claro quién ha estado con las mujeres, y quién no”.
La representante del PP en el acto fue la vicesecretaria sectorial Andrea Levy, a pesar de que inicialmente su partido no se había adherido, y que afirmó que el Gobierno de Mariano Rajoy “tiene y ha tenido sensibilidad con este tema, como no puede ser de otra manera”.
Por su parte, Alberto Garzón, de IU, defendió durante la manifestación la necesidad de “luchar por una concepción feminista de la vida”.
Al finalizar el recorrido, representantes del Movimiento Feminista leyeron un manifiesto en el que denunciaban que la violencia machista “es la más grave violación de los derechos humanos de las mujeres”.
Hay que destacar que la repercusión mediática de esta manifestación fue espectacular y que incluso se hizo sentir desde días antes de que se llevara a cabo.
Los últimos tres meses, casi el doble de feminicidios
Ahora, cuando finaliza el año, cabe preguntarse si este tipo de manifestaciones contra la violencia machista, con tanta repercusión mediática, tienen algún efecto positivo en el sentido de reducir el número de feminicidios en España o si, por el contrario, se puede producir un “efecto llamada”. Veamos los datos estadísticos.
Según la información publicada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad sobre la violencia de género, el número de mujeres muertas a manos de su pareja durante 2015, hasta el 30 de diciembre, es de 55 víctimas, distribuidas por meses como sigue: enero (3 mujeres asesinadas), febrero (2), marzo (4), abril (1), mayo (4), junio (4), julio (8), agosto (6) y septiembre (2).
Es decir que en los nueve primeros meses del año murieron por esta causa un total de 34 mujeres, o sea una media de 3,77 por mes.
Sin embargo, entre octubre, mes en el que ya hubo una cierta repercusión mediática sobre la manifestación que se estaba preparando, y diciembre, el número de feminicidios creció de forma significativa hasta alcanzar las 21 víctimas en tan solo tres meses.
En cada uno de los meses de octubre, noviembre y diciembre, en este último mes contabilizando hasta el día 30, el número de mujeres fallecidas a manos de su pareja fue de 7, es decir una media de 7 víctimas por mes.
Así, la estadística de feminicidios según el Ministerio de Sanidad nos dice que la media de víctimas por mes en los tres últimos meses fue casi el doble que en los nueve meses anteriores. Un dato para reflexionar.
No le veo la relación con efecto llamada.Lo que si que está claro que los feminicidios crecen en epocas de vacaciones (julio/agosto y diciembre/enero)