fbpx

109 años del genocidio armenio

COMPARTIR EN REDES

Más de un millón y medio de armenios perdieron la vida en una campaña de deportación y exterminio, dejando una herida abierta en el pueblo armenio que aún perdura a lo largo de los años.

A pesar de los esfuerzos por mantener viva la memoria de aquellos acontecimientos, la negación persistente por parte del actual Estado turco, heredero del Imperio Otomano, añade una capa de dolor y frustración a la búsqueda de justicia y reconocimiento. El reclamo de «justicia, memoria y reparación» es evidente en el contexto actual marcado por crisis y disputas territoriales.

Una herida que sigue sangrando

El reciente conflicto entre Azerbaiyán y Armenia, con la consecuente pérdida de territorios por parte de este último, ha avivado las llamas de la memoria. Para muchos armenios, las invasiones azeríes y el conflicto en Nagorno Karabaj no son sino una continuación de aquel plan genocida, una herida que sigue sangrando en el alma colectiva del pueblo armenio.

En medio de estas conmemoraciones, las voces de líderes y activistas armenios claman por una memoria justa y completa. El diputado Andranik Kocharyan destaca la necesidad de construir cimientos sólidos en torno a la verdad histórica, argumentando que la falta de registros detallados podría permitir que Turquía continúe negando los hechos atroces del pasado. Sin embargo, esta búsqueda de una memoria objetiva no está exenta de controversia, como lo demuestra la reacción negativa de algunos sectores de la sociedad armenia ante la propuesta de Kocharyan.

Mantener la memoria histórica

La diáspora armenia, dispersa por todo el mundo como resultado de siglos de persecución, también levanta su voz en este debate.

Para muchos descendientes de sobrevivientes del genocidio, cualquier intento de cuestionar la magnitud de la tragedia es inaceptable. Suren Manukyan, exsubdirector del Museo del Genocidio Armenio de Ereván, advierte sobre los peligros de minimizar el número de víctimas y la importancia de mantener viva la memoria histórica.

En medio de estas discusiones, las palabras del mandatario armenio, Nikol Pashinian, han generado cierta controversia al evitar el término «genocidio» en sus discursos recientes. Esta elección de lenguaje, junto con su cuestionamiento sobre la presencia del monte Ararat en el escudo turco, refleja la complejidad política y emocional que rodea el tema del genocidio armenio.

Cristianos perseguidos

Mientras tanto, el proceso de normalización de relaciones entre Armenia y Turquía, iniciado en 2022, parece estancado en la actualidad. Aunque ambas partes han expresado su voluntad de avanzar en este proceso, las diferencias persisten, especialmente en lo que respecta a la apertura de la frontera entre ambos países.

El aniversario del genocidio armenio es más que una fecha en el calendario. Es un recordatorio doloroso de las consecuencias devastadoras de la persecución de los cristianos.

En un contexto más amplio de persecución religiosa, Gia Chacón fundó For the Martyrs para recordar al mundo que los cristianos son la comunidad religiosa más perseguida del mundo. Cada año desde 2020 convocan una manifestación en Washington, D.C. para mantener viva su memoria y favorecer la ayuda. Este año se celebrará el próximo sábado.

¿Te ha gustado el artículo?

Ayúdanos con 1€ para seguir haciendo noticias como esta

Donar 1€
NOTICIAS RELACIONADAS

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.