Cuando la tormenta pase
y se amansen los caminos
y seamos sobrevivientes
de un naufragio colectivo.
Con el corazón lloroso
y el destino bendecido
nos sentiremos dichosos
tan sólo por estar vivos.
Le daremos un abrazo
al primer desconocido
y alabaremos la suerte
de poder conservar a un buen amigo
Y entonces recordaremos
todo aquello que perdimos
y de una vez aprenderemos
todo lo que no aprendimos.
Ya no tendremos envidia,
pues todos habrán sufrido.
Ya no tendremos desidia.
Seremos más compasivos.
Valdrá más lo que es de todos
que lo jamás conseguido
Seremos más generosos
y mucho más comprometidos.
Entenderemos lo frágil
que significa estar vivos.
Sudaremos empatía
por quien está y quien se nos ha ido.
Extrañaremos aquel pobre viejo
que nos pedía un peso en el mercado,
que ni supiste su nombre
pero siempre estuvo allí a tu lado.
Y quizás ese pobre viejo
era tu Dios disfrazado.
Nunca le preguntaste su nombre,
porque estabas apurado.
Y todo será un milagro
Y todo será un legado
Y se respetará la vida,
esa vida que ahora hemos ganado.
Cuando la tormenta pase
te pido, apenado, Dios mío
que nos devuelvas mejores,
quizás como nos habías soñado!!!
Mario Benedetti
1 Comentario. Dejar nuevo
Me Pareve Maravilloso y Muy Poetico en Su Deseos De Cambios Tengo mis Dudas No Se Si Sera Tan Asi Como lo Describe Tan Empaticamente , Seria Muy Lindo Pensar que Despues de Esta Crisis Mundial , Los Paises Potencias y Capitalistas del Mundo Volveran A Ocupar Sus Lugares y Todo esto Qie Sentimos habra Quedado Solo en Un Momento y Olvodado de a Poco ocupando el Compartimento de los Recierdos y Nada Mas