En una controvertida medida que ha generado debate, el director del prestigioso colegio Harris Westminster, ubicado en Londres, ha anunciado a través de Twitter que se prohibirá a los alumnos dirigirse a sus maestros utilizando los tradicionales términos «señor» o «señorita» (sir o miss en inglés). En su lugar, se les instará a utilizar los nombres de pila de los profesores a razón de un nuevo invento ideológico: la misoginia cultural.
James Handscombe, máximo responsable de esta institución de educación secundaria y superior, ha afirmado que esta medida tiene como objetivo combatir lo que considera una «misoginia cultural» y fortalecer el compromiso hacia un mundo más equitativo. Según informa el Daily Mail, el claustro de profesores ha consensuado esta decisión en aras de promover la dictadura de la igualdad de género.
We’re trying something new at Harris Westminster – https://t.co/Di0bA83FC7 – introduced, obviously, in an assembly. Equally obviously sly references, liminal spaces, and an attempt at the record for most shocking language abound.
— James Handscombe (@JamesHandscombe) June 5, 2023
El Harris Westminster, considerado uno de los mejores centros de «sixth form» en el Reino Unido, se destaca por sus excelentes resultados académicos. Fundado en 2014, este centro educativo gratuito tiene como objetivo brindar oportunidades a estudiantes de las clases menos privilegiadas.
Aunque la medida ha sido bien recibida por algunos docentes (una profesora manifestando su desagrado al ser llamada «señorita»), ha generado un intenso debate en la sociedad. Los críticos argumentan que esta decisión es un ejemplo de la excesiva corrección política y la imposición de una cultura del feminismo radical, que busca eliminar cualquier forma de distinción de género.
Es fundamental reconocer y respetar la dignidad de todas las personas, independientemente de su género. Sin embargo, esta medida es una exageración que diluye las diferencias naturales entre hombres y mujeres, en lugar de celebrarlas y valorarlas.
Mientras que algunos defienden esta medida como un paso hacia la igualdad y la erradicación de estereotipos, el énfasis en la eliminación de títulos de género es una distracción de problemas más urgentes que afectan la educación y el bienestar de los estudiantes.
El debate sobre el uso de términos de género en el entorno educativo seguramente continuará, ya que las diferentes visiones sobre el equilibrio entre la igualdad y la preservación de las diferencias entre hombres y mujeres siguen siendo temas de discusión en la sociedad actual guiados por la dictadura de la ideología de género.
1 Comentario. Dejar nuevo
Seguro que los alumnos no utilizan los tratamientos se Sir y Miss en sentido misógino. La misoginia solo la perciben el director y los profesores que están imbuidos de los prejuicios de género y obsesionados en buscar misoginia en donde no la hay.
De todas formas, llamando a los profesores por su nombre de pila se mantiene, en general, la diferencia de género. Sin embargo, no parece aceptable que un alumno se dirija a un profesor con su nombre de pila, sin más, al modo como se dirige a sus compañeros de clase. Eso es suprimir su autoridad distintiva como profesor, aparentado una aproximación en las formas que puede tildarse de acoso.
En fin, tal como están las cosas, no ha de tardar la exigencia a los alumnos de que se dirijan a sus profesores con el título de “camarada” seguido del apellido. “Camarada Fulano” para un hombre, y “Camarada Mengano” para una mujer, por ejemplo. Además de la deseable neutralidad de clase y de género, este sistema tiene la ventaja adicional de que un profesor se puede trans-formar en profesora, y viceversa, sin que afecte para nada al tratamiento que le dan los alumnos.