persecUna vez más se demuestra la potencia de la oración y el sacrificio de los hijos de Dios.
Ayer, domingo, el régimen nicaragüense de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha confirmado que 19 religiosos han sido liberados y deportados al Vaticano.
Entre ellos se encuentran el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, detenido durante más de 500 días en una de las peores cárceles del país, y condenado a 26 años de prisión por el régimen de Daniel Ortega. También han sido liberados monseñor Isidoro Mora, obispo de Siuna y 15 sacerdotes y 2 seminaristas a quienes el régimen encarceló en Navidad y Año Nuevo.
Al concluir la celebración de la Misa dominical, monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, exiliado en Miami, proclamaba la noticia visiblemente emocionado «nuestros pastores están libres».
La liberación ha tenido lugar pocas semanas después de que monseñor Báez hiciera una llamada a la Iglesia en todo el mundo, a través de sus redes sociales. Monseñor pedía a la comunidad internacional que exigiera la libertad de todos los presos políticos y la restauración del orden democrático en el país.
Con los nuevos destierros de religiosos, son ya varios obispos y sacerdotes los desterrados por el régimen en un año. Entre 2018 y 2024, más de 200 religiosos y religiosas han sido sometidos al destierro, expulsión o negativa de ingreso a Nicaragua.
“Los liberados han aterrizado en el Aeropuerto Fiumicino de Roma y han sido acogidos por la Santa Sede”, detalló monseñor Báez quien agradeció las gestiones que se hicieron desde El Vaticano. Los fieles recibieron la noticia entre vítores y un fervoroso aplauso.
Monseñor Báez también apuntó “ha sido una prueba del poder de Dios y de toda la presión internacional que se ha hecho en contra de esta dictadura irracional y criminal y ,sobre todo, la sabia y fina actuación de la diplomacia del Vaticano.”
El periodista de temas políticos, religiosos y sociales, Emiliano Chamorro, según, filtraba en su twitter el comunicado oficial firmado por el Gobierno de Nicaragua, en el que el régimen de Ortega y el pueblo de Nicaragua, agradece “profundamente al Santo Padre, Papa Francisco; a la Secretaría de Estado de la Santa Sede; a Su Titular, Cardenal, Su Eminencia Reverendísima, Pietro Parolin, y a su Equipo de Trabajo, por las muy respetuosas y discretas coordinaciones realizadas para hacer posible el viaje.”
Una vez más se demuestra la potencia de la oración y el sacrificio de los hijos de Dios Share on X