Por Jesús Domingo
Los datos del turismo de los pasados meses de julio y agosto en España confirman un cambio claro de tendencia. Es la primera vez desde 2010 que no solo no crecemos en el número de viajeros sino que bajamos. En concreto, un 4,9 por ciento en julio. Es cierto que la recuperación de mercados como el tunecino, el egipcio o el turco nos ha perjudicado este año, pero también que, a cambio, nos ha traído un turismo con mayor poder adquisitivo. En cualquier caso, no podemos bajar la guardia; es un sector crucial para nuestra economía que aporta casi el 15% al PIB.