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Libertad religiosa frente a la opresión

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No son pocos los frentes en los que se encuentran inmersos los cristianos ante la opresión que viven por no poder expresar su fe de forma libre. El ejemplo de lo que sucede en Nicaragua  nos hace pensar, que hay que condenar los medios que utilizan los gobiernos autoritaritos, para cercenar la libertad de culto, que prevé nuestra Carta Magna en su artículo 16.

Sin embargo, hemos tenido ejemplos de personas que valientemente han  dado un paso al frente para cambiar lo que debe ser todo derecho de un ciudadano, que de forma intangible decida profesar de manera pública sus  creencias.  La Libertad religiosa se manifiesta, en expresar la forma de amar explícitamente sin restricciones al creador, por todo el bien que  nos hace y  nos hará siempre.

San Pablo nos habla que el amor no pasará jamás, en su carta a los Corintios, y es un sello de identidad que debe permanecer para siempre en nuestro corazones el hecho de que tenemos a alguien que   nos ama más que nosotros mismos. Y por ello, tenemos que decir claramente sí a Dios y enfrentarnos directamente con nuestros enemigos, pues es una lucha frontal contra nuestra fe, la que se libra actualmente.

Comienza la campaña de 40 días por la Vida en España. Una campaña que el Gobierno quiere frenar bajo amenaza de cárcel para los cristianos.

 

Un claro ejemplo de ello, lo tuvimos con un dirigente político recientemente fallecido Mijail Gorbachov, que trajo la libertad religiosa a 290 millones de soviéticos, este personaje que insertó la perestroika y remodelación del sistema económico en su país, permitió que se  formaran iglesias cristianas para proliferar su fe,  y  dio un aldabonazo ayudando a aquellos otros países que se diseminaron de la antigua URSS, extendiendo el cristianismo más allá de las fronteras del comunismo.

Es un acto valiente sobre el que hay que meditar, por el que un político reconocido abiertamente ateo haya podido empujar en un  momento de la historia a un cambio, el cual ya fue anunciado por la Virgen de Fátima a los 3 pastorcitos en Cova de Iria en 1917, pidiendo que rezaran por Rusia para que sus errores no se extendieran por el mundo, y en algo esa profecía se ha cumplido, pues el régimen comunista está amenazado y su caída debe tener su origen en la voluntad divina que nos protege de un mal mayor, pero sabiendo que la lucha no cesara hasta el final de los tiempos.

Esta semana comienza la campaña 40 días por la Vida en todo el Mundo. En España, más de 20 ciudades verán legiones de personas rezando por el fin del aborto en la vía pública, junto a los principales abortorios del país. Personas que pronto se jugarán su libertad frente a la opresión de un Estado, el Español, cada vez más laicista y cada vez más radical, que quiere acabar con estas campañas con la amenaza de cárcel para los cristianos que recen en la vía pública.

El eslabón que  no se puede romper para el cristiano fue anunciado  por la Virgen María al interpelarnos a rezar el santo rosario por la salvación del mundo, es una guerra encarnizada en la que  nos encontramos contra el mundo para salvar nuestra fe, la cual la podemos palpar en el conflicto bélico de  nuestro país vecino Ucrania, que lucha por su autonomía territorial contra un país opresor que sigue extendiendo sus errores por el mundo y que amenaza a la paz global.

Pero en el fondo, subyace que el mal pretende arrebatarnos la esperanza, ante ello la respuesta debe ser afirmar que nosotros no somos de este mundo,  como dijo Jesús, en Juan (8, 21_29) y desde esta perspectiva no podemos cesar en luchar por nuestra Libertad religiosa y de culto, ni manifestarnos cuando a un pueblo hermano se le quita el asidero sobre que se sostiene.

Es evidente que nuestro señor no quiere a cristianos mediocres , pusilánimes y sin  valor por que el príncipe de este mundo es un león preparado a quien devorar y contra él, no podemos hacer nada sin la gracia divina, y esta se las da el señor a sus  amigos mientras duermen gratuitamente.

Por eso es nuestra decisión salir a pelear la buena batalla que ya ganó San Pablo,  y darle al Señor un sí sin medida, en tu casa, en tu trabajo, en tu entorno de amigos, en todo lugar donde puedas dar un mensaje de esperanza sabiendo que te esperaran persecuciones … y te pregunto, tú estás dispuesto a combatir en esta batalla? Yo ya me decidí….

Eugenio Guevara Valdes

Asociación Cristianos en Democracia

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