El Salón Erótico de Barcelona, la feria de referencia de la industria pornográfica en Cataluña, ha lanzado su vídeo de promoción. En el mismo desarrolla las falacias que comúnmente ha presentado en anteriores vídeos.
Este año el vídeo ha querido centrarse en la supuesta libertad que abandera la pornografía. La industria pornográfica ha girado en sus planteamientos tradicionales probablemente para llegar al público joven y, en la actualidad, intenta convertirse en adalid del feminismo y de la educación sexual.
El vídeo está protagonizado por la influencer feminista Noemí Casquet y critica una supuesta educación opresora, el egoísmo frente a la inmigración ilegal, la explotación del Primer Mundo al Tercer Mundo o una supuesta tradición sexual machista que atenazaría a la mujer.
A continuación presentamos el vídeo [avisamos que parte del contenido es sexual y puede resultar explícito]:
Resulta sorprendente que la industria del porno, tan dada al machismo en sus producciones y al uso de la mujer como un objeto sexual sea quien realiza una promoción en defensa de la misma.
De hecho este escaparate de la pornografía está intentando hacerse un lavado de cara: la nueva edición apuesta por un mensaje feminista, se ampliará la distancia de seguridad con el escenario, y se prohibirá el uso de los palos selfie y las cámaras de gran formato.
Hace años la dirección dejó de subir a los asistentes para que tuvieran sexo en público con la mujer que estaba en el escenario. Una Ley fue necesario para ello, pero ahora quieren también evitar las comprometedoras imágenes de hombres hacinándose frente a los cuerpos desnudos de chicas armados con todo tipo de dispositivos de grabación.
Las contradicciones de la industria del porno
El periodista Ismael López Fauste ha publicado un vídeo que explica a la perfección las contradicciones de la industria pornográfica, una industria que conoce muy bien, ya que trabajó para ella dos años. López Fauste desarrolla contenido en redes sociales donde se dedica a cuestionar y denunciar lo que esconde detrás el negocio del porno.
La industria, denuncia López Fauste, «no quiere que la gente se dé cuenta del hermetismo de la industria pornográfica y de comportamientos mafiosos para las mujeres que estén dentro de ella».
También las redes sociales se han volcado con el debate que suscita -como cada año- la promoción del Salón Erótico de Barcelona. En ese sentido, el periodista, profesor y abogado Josep Manel Silva se preguntaba interpelando a la feminista Bel Olid si el vídeo promocional del Salón Erótico era realmente feminista: «¿Crees que es un vídeo feminista que dignifica las mujeres? Yo tengo muchas dudas»:
Bon dia @BelOlid ( i felicitats 😉). Aquest és el video de Saló porno de Barcelona. Creus que és un vídeo feminista que dignifica les dones? Jo en tinc molts dubtes. @AdaColau #feminisme https://t.co/7Ilng0lUqO
— Josep Manuel Silva (@JotaMSilvaA) October 4, 2019
De hecho, varios sectores del feminismo están reaccionando frente a la utilización que se está haciendo del mainstream positivo que vive el movimiento por parte de algunos sectores que tratan de sumarse a la ola. El porno, que tradicionalmente representa una industria que divulga la idea de una mujer cosificada, es uno de ellos.
La campaña para que el Ayuntamiento no ceda sus instalaciones
Precisamente la plataforma “Los 7000. Comunidad y participación” (@els7000) ha lanzado una reciente iniciativa dirigida a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau y a sus socios de gobierno del PSC, así como al resto de parlamentarios, un texto en el que piden que el Salón erótico de Barcelona no se realice en una instalación municipal.
La campaña integra una petición de firmas en Change para pedir a la alcaldesa que reconsidere su decisión. Y es que el consistorio de Colau ha permitido que el Salón tenga lugar en la instalación olímpica municipal de la Vall d’Hebron en Barcelona.
De esta manera, Colau y sus socios de gobierno no solamente están apoyando veladamente lo que suceda en ella sino que también estará obteniendo beneficios a expensas de esta promoción en una instalación emblemática de la capital catalana.
Los 7000 afirman en su petición que el propio Ayuntamiento de Barcelona estará contribuyendo a incrementar la violencia sexual en sus calles apoyando iniciativas favorables a la difusión de la pornografía.
“Esta relación entre pornografía y violencia social -prosigue el comunicado- no es un hecho nuevo, ya que se trata de una relación muy conocida en el ámbito científico y académico. Pero ahora toma una dimensión mucho más política por la advertencia de la máxima autoridad fiscal. La consecuencia lógica por parte de las administraciones públicas sería la de actuar para regularla y limitar por su carácter nocivo, del mismo modo que, en otro nivel se hace con el juego, el tabaco y el alcohol”.
Los 7000 tildan de “irresponsable” la actitud del consistorio y recuerda que “no puede ser cómplice, de una práctica que convierte a la mujer en un objeto sexual”.
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La mitad de asistentes de este año al Salón se quejaban de que era mas suave, que no había tanta «caña» ni tanto sexo. Creo que eso demuestra que los cambios en el Salón no eran «de boquilla», si no reales. Las productoras del porno no estaban presentes en esta edición, así que ahora (AHORA, en este año) ya no se puede considerar un evento de la industria pornográfica (incluso alguna productora ha lamentado que «parece que nos hayan echado de nuestro propio festival».)
Yo mismo, he lamentado algunos de estos cambios, pero los he entendido porque la sociedad está cambiando.
Es innegable que la industria actual del porno es machista, pero el porno en si mismo, como medio, no tiene porque serlo. Muchas cosas deben cambiar. Y creo que sería injusto negar que los nuevos responsables del salón han sido valientes por atreverse a realizar estos cambios sabiendo que iban a ser impopulares, y que les iba a tocar lidiar contra las críticas de su propio «bando» por una parte, y por otra, contra la de los cerriles de siempre que una vez ponen la cruz a algo, ya no la mueven ni medio milímetro vean lo que vean.
No se si eres jóven o mayor, pero creo que no tienes información sobre lo que el porno puede hacer en la mente de la gente. Lo primero es que crea adicción como cualquier forma de droga, ya que con la visión de estas imagenes la mente segrega dopamina, esto hace que cada vez las imágenes tengan que ser mas fuertes, para que la persona tenga su cantidad de dopamina. Con la técnica de neuroimagen, se puede ver realmente como es.
David, realmente si quieres hacer un favor a jóvenes y menos jóvenes, deja de congraciarte con la industria pornográfica, que mueve cantidades ingentes de dinero y mete en un pozo a la gente que manipula.
Primero, tengo 39 años.
Absolutamente todo (TODO) lo que produce dopamina puede, potencialmente, generar adicción. Por eso hay tantos tipos diferentes de adicción. Existe la adicción a las compras, al trabajo, a la moda… ¿Es que acaso comprar, trabajar o vestirse a la moda generan adicción en si mismas, son prácticas peligrosas? No, es que algunas personas tienen, por constitución, menos dopamina, y han encontrado algo externo (una conducta, una sustancia) que se la aumenta, por eso se enganchan. En las adicciones, lo menos importante es a que se es adicto, eso es circunstancial, el mecanismo biológico de la adicción es el mismo siempre.
La industria del porno no es en si más deplorable que la del deporte, donde también se manipula a mucha gente, donde también hay avaricia y pocos escrúpulos (en cualquier cosa donde se gane dinero los hay.) De vez en cuando aparecen testimonios de ex-actrices víctimas de abusos y degradaciones. Muchos de mis colegas pornófilos cometen el error de menospreciar estos testimonios, minimizarlos, atribuirlos a intereses , etc. Quiero dejar claro que para mi esos testimonios son verídicos y respetables.
Ahora bien, también existen testimonios en sentido contrario. Actrices, y también ex-actrices porno, que están muy orgullosas y nada arrepentidas de haber incursionado en este mundo, que dicen que su experiencia en el fue satisfactoria. Ignorar o desacreditar estos testimonios positivos es igual de injusto que hacerlo con los negativos. Ambos corresponden a realidades compatibles, de manera que por un lado, yo no puedo negar que en el porno hay mucha basura, y por otro, vosotros teneis que admitir que el porno no siempre es sordidez y degradación.