La editorial Caligrama publica Se acabó la farsa. La obra muestra la realidad considerada progresista en España y reflexiona sobre los verdaderos propósitos que esconde la ideología de izquierdas. Luis Asúa Brunt y Jorge Fernández-Sastrón ponen el foco de debate actual sobre un texto que sirve para observar a los dirigentes políticos nacionales, ¿dedicados a gobernar o a hacer política? «Nos gustaría conseguir que el deterioro de la educación pública, el paro juvenil o la imposibilidad de acceder a una vivienda fueran temas tan importantes como lo son la identidad sexual o la manipulada memoria histórica», cuentan los autores.
El libro se pregunta a quién beneficia la creación de una nueva ética moral que atiende a las minorías en vez de aquellas cuestiones que afectan a gran parte de la ciudadanía. La calidad de vida y el bienestar, el pesimismo europeo, el papel de los artistas, la idea de república, estos y otros temas amenizarán una lectura sencilla y humorística.
¿Cuál es el papel de la política? Los autores aseguran que «la política no es una profesión. Quien quiera dedicar su vida a servir a los demás debe entregarse, tratar de transmitir sus ideas y huir de las pequeñas rencillas en las que hemos convertido las sesiones de nuestros parlamentos».
Las ilustraciones de Emilio Fernández-Galiano Campos abren los capítulos de la obra. Los textos cortos viajan por la historia para trasladar al presente las preocupaciones que permanecen a lo largo del tiempo. Las visiones alternativas a lo a veces impuesto desde los atriles siembran de frescura y cercanía la experiencia lectora. El libro promueve el pensamiento libre y el camino hacia un futuro para todos.
Notas sobre los autores:
Luis Asúa Brunt. Nacido en Madrid, de madre inglesa, casado y padre de cuatro hijos, es un empresario, abogado y articulista ocasional que pasó más de una década inmerso en la política madrileña. Sus pasiones son escribir, la empresa y la política.
Jorge Fernández-Sastrón. Nieto del fundador de Galerías Preciados y empresario por vocación, siempre ha tenido una especial habilidad para la escritura. Después de años de reescribir y revisar textos de familiares y amigos para su publicación en diferentes medios, acepta la propuesta de su amigo Luis Asúa para emprender, a través de este libro, la aventura de intentar dejar, de una vez por todas, las cosas claras.
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