El grupo del PSC en el Parlament ha manifestado su incomodidad porque la Generalitat tenga un prior. Es por eso que ha impulsado una propuesta de resolución en la que cuestionan el nuevo nombramiento del prior de la capilla de la Generalitat, Josep Maria Turull, porque consideran que «casa muy mal con el carácter aconfesional del Estado».
El PSC parte de un razonamiento equivocado, ya que no es cierto que la Generalitat tenga un prior, si no que tiene un prior la capilla de Sant Jordi del Palacio de la Generalitat porque es una herencia histórica
En esa capilla es donde se hace una misa por la diada de Sant Jordi y se trata de un cargo honorífico.
Sin embargo, en el texto que han presentado los socialistas catalanes se dice que el relevo del prior, que tuvo lugar el pasado 2 de agosto en la capilla Sant Jordi situada dentro del Palau de la Generalitat, se produjo en el transcurso de una audiencia del presidente Quim Torra, a la que acudieron ambos sacerdotes -el saliente y el nuevo- y la Consellera de Presidencia, Meritxell Budó.
«Al acabar, se celebró una eucaristía en la capilla con presencia de todos ellos y los familiares de los religiosos», destacan los socialistas en su resolución en la que recuerdan que el artículo 16.3 de la Constitución establece que ninguna confesión tendrá carácter estatal y el 161.2 del Estatut concreta que corresponde a la Generalitat la competencia ejecutiva en materia relativa a la libertad religiosa.
El PSC se apoya en los masones para argumentar contra el prior
Los socialistas analizan los cambios demográficos que se han sucedido en Catalunya desde el restablecimiento de la Generalitat, y aseguran que además del incremento de la pluralidad de confesiones e iglesias, se ha dado una «creciente secularización» de la sociedad catalana.
Se basa para ello en un informe de 2018 de la Fundació Ferrer i Guàrdia, una organización reconocida por contar con numerosos masones, donde se sostiene que un 39% de la sociedad catalana se adscribe a opciones de conciencia no religiosas, mientras que un 58% lo hace en opciones de conciencia religiosa; y que el 90,9% de los matrimonios en 2018 se celebraron por lo civil.