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El feminismo cae en su trampa: 90 mil euros de multa a París por nombrar a demasiadas mujeres en cargos

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Las ideologías extremas pueden provocar que pasarse de frenada se vuelva contra ellas mismas. Es lo que ha sucedido en París, que se enfrenta a una multa de 90 mil euros por una norma feminista que, curiosamente, se ha vuelto en contra de los que la promueven.

Desarrollar leyes asimétricas puede provocar que la misma lógica contradictoria dé una voltereta contra esa asimetría y se cambien las tornas.

El municipio de la capital francesa ha nombrado, según la normativa existente, demasiadas mujeres en altos cargos. Precisamente se trataba de una norma que pretendía controlar el acceso de hombres a altas responsabilidades.

Por su parte, la alcaldesa de la capital francesa, la socialista Anne Hidalgo, a quien se atribuyen aspiraciones de concurrir a las presidenciales en el 2022, consideró «absurda» la sanción.

Según la normativa aplicable, que data del 2012 pero fue abrogada en el 2019, las grandes ciudades estaban obligadas a designar al menos un 40% de personas de cada sexo para los puestos directivos.

A pesar de que la regla era muy clara y París la violó en su momento -pues nombró a 11 mujeres y 5 hombres en el 2018-, Hidalgo expresó su enfado y perplejidad por la multa.

París, «demasiado feminista»

«La dirección de la ciudad se ha convertido en demasiado feminista», afirmó la alcaldesa, con ironía, en una intervención ante el consejo municipal, el martes.

Como señal de protesta y para llamar la atención de la opinión pública, Hidalgo anunció que, a principios del año que viene, irá a pagar ella misma la multa, con un cheque, al ministerio de la Función Pública. La acompañarán las mujeres que son adjuntas a la alcaldesa o que ocupan puestos de responsabilidad en la administración de la ciudad. Hidalgo atribuyó la multa al poder de la burocracia, de los automatismos del Estado francés.

«No entiende de discernimiento y, por tanto, se atreve a todo». Además de absurda, consideró la sanción «injusta, irresponsable y peligrosa».

Sin embargo, esta postura olvida que está cayendo en el extremo que pretende evitar. Lo cual revela, el posicionamiento ideológico de es apostura política: si con la norma se consigue extremar la propia postura, bien, si no, la norma no es útil.

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