La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) celebrará este sábado 26 de abril la III Fiesta de la Resurrección, un evento que une la música cristiana con la celebración del misterio pascual.
Sin embargo, esta edición estará marcada por la muerte del Papa Francisco, transformando el festival en un acto de oración, gratitud y homenaje al Santo Padre.
El evento, que comenzará a las 18:30 en la Plaza de Cibeles de Madrid, incluirá un momento especial de oración por el Papa Francisco, recientemente fallecido, a quien la ACdP encomienda con fe «a la presencia amorosa de Dios».
En lugar de cancelar la celebración, los organizadores han decidido mantenerla como un gran
canto de alabanza por la Resurrección y de agradecimiento a Dios por la vida y el ministerio del Papa Francisco».
Durante la I Fiesta de la Resurrección en 2023, el Papa Francisco envió una emotiva carta a los asistentes en la que animaba a usar la música como forma de oración:
No es una cosa desacertada responder con la música al inmenso don que el Señor nos hizo con su Resurrección»
escribió, recordando que, como decía San Agustín, el canto da voz al corazón. La carta concluía con una súplica cercana y humilde: «Y, por favor, si quien canta reza dos veces, no se olviden de cantar por mí».
En su comunicado oficial, la ACdP expresa su «profundo dolor por el fallecimiento del Papa Francisco».
Por eso, este festival se convierte también en un acto de intercesión por su alma, invocando al Dios de la Misericordia, la Justicia y la Esperanza, a quien el Papa consagró su vida sin descanso.
Música, fe y comunidad católica
La Fiesta de la Resurrección ha sido desde sus inicios un espacio de encuentro para miles de fieles católicos que celebran con música la alegría del Evangelio. En esta tercera edición, se suma una dimensión profundamente espiritual: orar por el Papa Francisco y rendirle homenaje como líder de la Iglesia Católica y servidor incansable del Evangelio.
Con un mensaje de esperanza, la ACdP retoma las últimas palabras del Papa en aquella carta que hoy adquiere un nuevo significado: «Canten y caminen!».
Este sábado, la Iglesia no solo cantará: también rezará unida por el alma de su Pastor.
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