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Inversión de la pirámide, eutanasia activa y Covid 19

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Afirmo con conocimiento profesional de causa que España ostenta la tasa de natalidad más baja del mundo. Afirmo también que Cataluña ostenta la más baja dentro de España. Y que la ciudad de Barcelona ostenta la más baja dentro de Cataluña. ¡Mi ciudad natal ostenta la tasa de natalidad más baja del mundo! (en cursiva y en negrita). La pirámide actuarial en términos demográficos es la cuantificación gráfica de una determinada población por edades. Es un triángulo. En principio uno normal con mayor base, mejor uno equilátero que isósceles. A medida que la edad avanza los integrantes de una determinada edad disminuyen en número. Esto de la pirámide es un principio matemático de primera magnitud esencial para elaborar una tabla actuarial de primas (precios) de seguros personales de Vida. No solo los de riesgo sino también los de ahorro.

El problema político pandémico es que la pirámide está invertida hace lustros. No nacen niños suficientes para sostener cuando sean adultos a los ancianos con mayor esperanza (previsión) actuarial (actual) de vida. La eutanasia no surge sólo por el menosprecio ateo a una vida anciana limitada en lo físico y solitaria. Surge como una especie de necesidad política de reducir la esperanza de vida existente a la más mínima ocasión que se presente. Retengo aún en mi memoria lo que yo observé sin fiebre, estando ingresado en el infame edificio de urgencias Helios del Hospital Clínico de Barcelona. Residía ya en Rubí y mantenía operativa la atención médica esclerótica en este centro hospitalario, médico de cabecera incluida en el CAP de zona.

La noche que decidí largarme orienté sin fiebre desde mi cama a los operarios de mantenimiento de los aparatos de aire acondicionado. El de mi box no “funcionaba”. La atmósfera era irrespirable. ¡Sí que funcionaba! Había varios boxes con sus splits. ¡Ningún split numerado! ¡Ningún mando a distancia numerado! El split que funcionaba pues funcionaba y el que no pues no. ¡Funcionaban todos! ¡Y todos los mandos a distancia dentro de una caja! Lo que no funcionaba era el personal sanitario de los distintos turnos de mañana, tarde y noche, especialmente el nocturno empezando por su responsable. Tuve que levantarme un día a los dos de la mañana en calzoncillos y afearle en voz alta su actitud. Recuerdo que la mujer que tenía enfrente calmó su voz.

Eutanasiar a veces es fácil. A personas solas ingresadas sin nadie y que están en su declive vital. Unos boxes de urgencias son una justificación. ¡De conciencia no creo! Las personas fallecidas en boxes de urgencias son retiradas en camilla totalmente cubiertas. ¡Pero nunca a cara descubierta como la mujer que tenía viva enfrente de mi cama! Una vez retirada del lugar que ocupaba fue el destinado a extracción de sangre al día siguiente designado y anunciado previamente. Por haberme vestido y querer largarme a las 6 de la mañana fui castigado con inyección de no sé qué para atontarme y obligación impuesta de menores y mayores en orinal desde mi cama. Estuve tentado de presentar denuncia en regla una vez dado de alta. Pasé 5 días en boxes… ¡para nada curativo!

¡Y llegó el Covid 19 en el mundo entero año 2020! Con fallecimientos, pandemia generalizada, desbordamientos hospitalarios, personal médico infectado y el temor en la población confinada en todas partes del mundo. El test con palito dentro de la boca yo no lo observo en mi entorno ciudadano, salvo reportajes televisivos siempre los mismos en China. El confinamiento sí que lo observo. Observo el confinamiento ciudadano a domicilio y el televisivo en residencias de mayores. Son lugares preferentes de la pandemia y por tanto del confinamiento político. Son lugares con menor esperanza de vida por razón de edad de los internos. Son lugares ideales para eutanasias políticamente justificadas. Si la población de mayores desciende la pirámide actuarial queda más templada. En caso de achaque coronavirus en persona joven el confinamiento tendrá una tendencia a ser impuesto médicamente en el propio hogar. Con todo prefiero la pirámide de Maslow que una actuarial.

Gracias a Dios solo padezco esclerosis múltiple. Es una enfermedad que no me impide, con mi bozal farmacéutico colocado, salir a la calle para compras domésticas. A ser factible primero una, regreso a casa, luego otra y las que sean menester. Es un modo práctico justificado de ejercitar la musculatura. ¡La mía señores políticos!

PD. Mi conocimiento profesional de causa:  https://www.forumlibertas.com/la-piramide-invertida-del-sistema-pensiones/

 

 


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