El proyecto de ley que establece la asignación económica única por hijo ha recibido 452 votos a favor en la Cámara de Diputados italiana. Ahora la medida pasa al Senado, y luego el gobierno tendrá 12 meses para implementar la petición recibida del Parlamento.
De esa manera Italia aprobaría una asignación mensual por hijo sin limitaciones de renta y a partir del séptimo mes de embarazo (así se reconoce también implícitamente el derecho a la vida del no nacido).
Se trata de un paso positivo y una conquista para las familias, aunque queda tiempo por delante hasta que el país finalmente devuelva justicia y apoyo a las familias con niños.
Se abren algunos interrogantes al respecto de la medida: para cuántos niños habrá 240 euros por mes, ¿la medida será hasta 18 años o hasta 26 años? (siempre que el niño sea dependiente y en orden con los estudios, parece ser la fórmula adoptada); o incluso, ¿será una reforma para siempre, estructural, o se tratará de un experimento político? Estas cuestiones tienen que estar necesariamente definidas, ya que las familias deben saber en su planificación.
Finalmente, el obstáculo más difícil será la capacidad de reorganizar de manera armoniosa esta asignación económica y todas las medidas de apoyo existentes hoy dentro de esta nueva medida.
Ahora se abren 12 meses para llevar a cabo la medida, que se enfrentará a la resistencia burocrática y las complejidades técnicas objetivas de esta reorganización. No es sencillo este punto, ya que la medida propone un sistema unitario, cancelando muchas reglas para hacer una.
La asignación económica y el arco parlamentario
En cuanto a los apoyos a la asignación económica, el contexto político ha sido positivo: en el voto real, todas las partes se adhirieron a esta propuesta, por el bien de la familia y, por lo tanto, del país. Más allá de los intereses y propuestas del partido y mucho más allá de la oposición entre la mayoría y la oposición.
Finalmente, el bien común se está redescubriendo alrededor de la familia, y todas las partes finalmente entienden que la familia no es un interés particular, sino que es la microfibra social la que mantiene unido al país.
Otra característica de la norma, quizás pasada un poco en silencio, pero es relevante, y es que este cheque será perceptible «a partir del séptimo mes de embarazo»: una mejora inesperada y poderosa de la vida aún en el vientre, un reconocimiento renovado de la dignidad legal de los concebidos capaces de llegar.
Italia aprobaría una asignación mensual por hijo sin limitaciones de renta y a partir del séptimo mes de embarazo Share on X