La criminóloga Andrea Giménez-Salinas ha publicado el mayor informe elaborado hasta ahora sobre la delincuencia sexual en España. El informe constata que España se encuentra entre uno de los países donde hay más bajos índices de criminalidad sexual en todas sus formas y, al mismo tiempo, uno de los países más seguros en ese apartado.
“España se encuentra entre los países más seguros del mundo y entre los países que tienen menores cifras de delincuencia sexual en Europa”, afirma la experta . Para llegar a esa conclusión su equipo ha analizado 342 atestados policiales y ha recogido datos de las 6.600 denuncias de agresiones sexuales en las que no existiera relación previa entre el agresor y la víctima.
La fuente de los atestados son el Ministerio del Interior y son de entre los años 2009 y 2013. Esta tipología de crímenes constituyen el 20% del total de abusos sucedidos en nuestro país.
Giménez-Salinas, presidenta de la Fundación para la Investigación Aplicada en Delincuencia y Seguridad, en Madrid, asegura que “estas agresiones, especialmente las que terminan con graves consecuencias para las víctimas, son situaciones excepcionales, aunque muy graves y alarmantes”.
Y es que el estudio sitúa a España con sus cifras en el panorama internacional comparándolo con otros países. Mientras que en España una de cada 1.000 mujeres afirma haber padecido algún tipo de delito sexual durante los últimos cinco años (delitos que irían desde tocamientos hasta los casos extremos de violaciones), en Portugal esa tasa se multiplica por dos, por tres en Francia, por cuatro en Alemania, por cinco en Dinamarca, por seis en Países Bajos, por ocho en Canadá, por nueve en Suiza, por 13 en Suecia y por 14 en EstadosUnidos.
El perfil del abusador sexual
El informe permite definir un perfil del asaltante sexual en España. El informe explica que suelen ser hombres jóvenes, de entre 18 y 35 años en el 57% de los casos, y de nacionalidad española en un 52% o procedentes de Sudamérica (15%), del Magreb (11%) o de Europa del Este (10%).
Tras España, los países de origen más habituales de los agresores son Ecuador, Marruecos y Rumanía. También se destaca que en un 32% los asaltantes contaban con antecedentes policiales y hasta un 17% ya contaba en su haber con un delito sexual durante el año previo y por lo tanto eran reincidentes. En el 50% de esos delitos el agresor no se había desplazado más allá de un kilómetro de radio de su propia casa.