La presidente del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha reconocido que la economía está sufriendo un gran impacto negativo por la pandemia y que el decrecimiento es cada vez «más rápido de lo esperado, tras el fuerte rebote de los meses de verano». La francesa ha explicado que la segunda ola de covid-19 está lastrando al sector servicios, el que mayor peso tiene en el PIB de la zona euro, lo que a su vez está presionando a la baja la inflación y afectando al mercado laboral, con previsiones más bajas.
La entidad ha advertido de que el Consejo de Gobierno tendrá en cuenta el actual escenario pandémico para formular sus proyecciones en el mes de diciembre y para «recalibrar» los instrumentos de los que dispone para hacer frente a la crisis. «Ya estamos trabajando para recalibrar todos nuestros instrumentos en la próxima reunión», ha reiterado en varias ocasiones Lagarde para asegurarse de que era lo suficientemente clara. «Todos los instrumentos», ha subrayado, no sólo el Programa de Compras de Emergencia para Pandemias (PEPP).
Lagarde también ha hecho hincapié en el consenso absoluto de todos los miembros del Consejo de Gobierno para perfilar las nuevas medidas a partir de diciembre y ha resaltado el compromiso total del BCE para apoyar la recuperación económica de la zona euro. «Lo hicimos en la primera ola y lo haremos en la segunda», ha explicado.
En el comunicado remitido a los medios tras la reunión mensual del Consejo de Gobierno en Fráncfort, el BCE asegura que «la nueva ronda de previsiones macroeconómicas elaboradas por los expertos del Eurosistema en diciembre permitirá una evaluación exhaustiva de las perspectivas económicas y el equilibrio de riesgos».
Sobre la base de esta evaluación actualizada, el Consejo de Gobierno «recalibrará sus instrumentos, según proceda, para responder a la situación actual y garantizar que las condiciones de financiación sigan siendo favorables para apoyar la recuperación económica y contrarrestar el impacto negativo de la pandemia en la inflación proyectada», añade.
Lagarde, ha reconocido que la economía está sufriendo un gran impacto negativo por la pandemia y que el decrecimiento es cada vez más rápido de lo esperado, tras el fuerte rebote de los meses de verano. Share on X
