El castillo de naipes de la ideología de género se cae cada vez que una evidencia científica surge. Es el caso de la entrevista que ha tenido lugar en el diario autodenominado progresista y altavoz del Gobierno del PSOE, El País, en una entrevista realizada a la historiadora de 78 años, Élisabeth Roudinesco.
Esta historiadora, biógrafa de Freud y Lacan, que vive en París respondió las preguntas de la cabecera con sede en Madrid: “Lo valiente hoy es estar en una posición moderada, nuestra época está enloquecida”.
Roudinesco considera que vivimos en «una época de extremismos», en la que «la búsqueda de las identidades ha ocupado el lugar de las rebeliones de antaño, que eran más sociales y emancipadoras. La locura identitaria es el repliegue total en una sola identidad, un repliegue en vez de una libertad».
La historiadora evidencia que en todas las reivindicaciones identitarias «está la idea de rechazar la biología». Y prosigue: «Si decimos que, desde el nacimiento, estamos asignados a una identidad de género que rechazamos, significa que negamos la existencia de la diferencia anatómico-biológica de los sexos. Uno no es esclavo cuando nace en un sexo u otro. Durante siglos se redujo al ser humano a su naturaleza biológica y ahora se le quiere encerrar en su construcción social. No. El ser humano es a la vez un sujeto biológico, un sujeto social, un sujeto psíquico».
«¿Habla de la cuestión trans? ¿O de la raza también?», pregunta el periodista, Roudinesco responde: «Mire lo que sucede con las reivindicaciones identitarias negras. Hay una primera etapa que es la emancipación, la igualdad, ligada a una lucha social. Las razas no existen científicamente. Pero ahora se dice que las razas sí existen —porque hablar de personas racializadas es esto— y a mí me plantea un problema.»
La biógrafa pone en duda que la izquierda actual represente realmente a la izquierda: «¿Acaso son de izquierdas?», se pregunta, para afirmar: «La extrema derecha es nacionalista y cree en la existencia real de las razas. La deriva identitaria del otro campo —yo diría de la ultraizquierda, pues para mí no es la izquierda— dice que los negros y las mujeres negras están explotados, pero ante esta explotación la posición es que debemos luchar en tanto que negros. ¿Y yo no tengo derecho a participar en un combate antirracista por ser blanca? Es lo que dicen ellos«.
Roudinesco sostiene que «Aunque no seamos todos iguales, hay cosas comunes que definen a la humanidad y de las que no se puede escapar. Se es hombre o mujer. Después, con eso, hacemos algo. Pero la biología existe».
Las supuestas identidades de género son un tema central en el libro y sobre la Ley trans española opina: «Puede ser corregida. Ha dividido a la izquierda, son cuestiones que no deben politizarse. Atañen al derecho y a la ciencia. Esta ley privilegia el deseo de personas que sufren. El sexo biológico existe y no responde ni a una demanda, ni a una voluntad de asignar, ni a una elección. No se puede ni anular el género en beneficio del sexo ni anular el sexo en nombre del género. Estamos hechos de varios componentes».
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Sí, eso es la cuestión identitaria es, creo, que casi el último paso en la demolición de nuestra sociedad, porque se puede legislar sobre la moral o la familia para tumbar los valores de nuestra sociedad, pero hacerlo sobre la identidad del individuo, es tanto como decir que ya no hay géneros, puesto que se puede cambiar facilmente y cuando se quiera, y digo que es lo último porque es atentar contra el propio ser y su identidad. Es conseguir la «igualdad de género» y
decir que ya nadie es nadie porque la naturaleza lo diga, sino que se es porque uno es lo que quiere. Es la estupidez y la maldad en grado sumo. Creo que es una ley básicamente ilegítima y que debería ser removida de nuestra sociedad para sanearla. Porque afortunademente la Naturtaleza nos ha creado con nuestros sexos y el que no esté setisfecho que se lo demande, pero que no nos toque las narices.
La izquierda, fracasada socialmente en la URSS, Cuba, Corea del Nortre, etc, pretende, afiliandose a ideologías que nada tienen que ver con ella, como la homosexualidad, indigenismo, lgtbismo, ecologismo, animalismo, etc, )de hecho en los paises socialistas se han perseguido a los homosexuales) derribar nuestra sociedad y sus valores. ¿Se conoce algún miembro de estos «ismos» que sea de derecha?, no, son patrimonio de la izquierda y son medios de penetración en la sociedad y de hacer mella en la misma. La ley «solo sí es sí» tan a debate entre Podemos y Psoe, se dice que es una chapuza hecha por indocumentados, pero la Sra. que ha llevado a cabo su redacción es una juez, y si la ley se ha hecho así no ha sido por un error, sino a drede, obedeciendo a una ideología de izquierda, que no le importa que se pongan en libertad a agresores sexuales, violadores, pederastas, etc. ¿Alguien del Ministerio de igualdad, se ha disculpado públicamente por este hecho,…? Aunque hay quien dice que » es peor un tonto que un malvado», cuando el malvado se viste de tonto, es lo peor.