Este sábado 27 de marzo tuvo lugar el examen MIR (Médico Interno Residente), la prueba exigida a médicos, españoles o extranjeros, para acceder a una plaza de médico especialista en formación en el Sistema Nacional de Salud en España. Esta edición apareció el tema de la eutanasia.
No es casualidad que dos semanas después de haber sido aprobada por parte del Gobierno de PSOE y Podemos la Ley de la eutanasia haya surgido este tema en el examen de los profesionales que, lamentablemente, están llamados a aplicarla.
La batalla de las ideologías se empieza jugando en el lenguaje. Es por eso que la instauración de términos eufemísticos que desprendan de cargas realistas a actividades como la eutanasia, el aborto o los vientres de alquiler es fundamental para los grupos que desean su implantación.
Así, según estas visiones, no existe suicidio, si no muerte digna; no hay aborto, si no interrupción voluntaria del embarazo; y no hay vientres de alquiler, si no maternidad subrogada.
En ese sentido se dirigió la pregunta número 41 del examen del MIR, que planteaba lo siguiente: «En un paciente terminal la omisión o la interrupción de tratamientos médicos vitales, para permitir a la persona que fallezca (interrupción de los tratamientos que permiten conservar la vida) se denomina:» y se ofrecían cuatro posibles respuestas: «Eutanasia activa voluntaria», «Eutanasia activa involuntaria», «Eutanasia pasiva», o «Suicidio asistido por un médico».
Precisamente han sido las asociaciones y colegios de médicos quienes más activas se han mostrado a la hora de pedir una revisión de esta norma y han pedido el establecimiento, por parte del Gobierno, de un debate en torno a ella, que no se ha producido. Esta postura es contraria a lo mostrado en el MIR.
En ese sentido, se manifestó en marzo el Consejo General de Colegios de Médicos (CGCOM), que advirtió al Gobierno que “no es oportuna” la creación de listados de médicos objetores, que, por razones de consciencia y de consecuencia profesional, no puedan aplicar la eutanasia a sus pacientes.
ForumLibertas también informó sobre las afirmaciones que había realizado el presidente del Colegio de Médicos de Madrid, Manuel Martínez-Sellés, en este sentido: “Si la eutanasia no es un acto médico, se hace difícil de entender por qué se exige que la realicen los médicos. La otra opción sería crear una profesión que se dedique a esto, como en su día había la profesión de verdugo. Lo que pasa es que esto no se contempla en esta Ley”.
2 Comentarios. Dejar nuevo
Muy acertado , igual que cuando en España era legal la pena de muerte, estaba «la figura del verdugo».
En esta ley, falta esa figura, ¡¡no se puede pretender que todos los médicos se conviertan en verdugos!!
Pues sí, si la eutanasia no es un acto médico, porque han de realizarlo los médicos? Muy buena pregunta. La Deontología médica establece que el médico está para curar, sanar, operar, etc, todo con el fin de conservar o mejorar la vida. Obviamente no se puede exigir a un médico que practique la eutanasia, que es un suicidio, voluntario por tal, con la ayuda de un profesional. Además este suicidio no se considera como tal, en el colmo de la ley , que lo considera una muerte natural, mientras que un suicidio motu propio, sin ayuda de nadie, no lo es.
Cuando las leyes se basan en ideologías y no en profesionalidad, pues se cometen auténticas barrabasadas, como es el caso.
Pero igual que el médico, otro sanitario cualquiera de inferior rango tampoco está obligado a practicarlo. Entonces quien prevee que asista a un suicidio asistido? El barbero? Ley estúpida, innecesaria, sin demanda social para crear un problema.