Un estudio reciente publicado en la revista «Human Reproduction» y presentado en la reunión de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE) en Ámsterdam ha proporcionado razones prácticas y médicas para oponerse a los riesgos de los vientres de alquiler. De el estudio se ha hecho eco recientemente The Telegraph
El estudio canadiense, que analizó los registros de casi un millón de nacimientos, concluyó que las madres víctimas del negocio de los vientres de alquiler tienen el doble de probabilidades de sufrir complicaciones peligrosas y graves durante el embarazo en comparación con las madres naturales.
Complicaciones médicas y riesgos elevados de los vientres de alquiler
Según el estudio, alrededor del 7% de las mujeres usadas como vientres de alquiler sufrieron complicaciones graves, en comparación con sólo el 2.4% de las mujeres con concepciones naturales y el 4.6% de las mujeres que se sometieron a fertilización in vitro (FIV).
Las complicaciones incluyeron hemorragias posparto y trastornos hipertensivos, que fueron significativamente más frecuentes en las mujeres usadas como vientres de alquiler.
En concreto, una de cada siete de estas mujeres experimentó hemorragias posparto, en comparación con una de cada 17 mujeres con concepciones naturales. Asimismo, una de cada siete mujeres «vientres de alquiler» tuvo trastornos de presión arterial alta, en comparación con una de cada 15 concepciones no asistidas.
Mecanismos potenciales y factores de riesgo
La Dra. Marina Ivanova, coautora del estudio, señala que son varios los mecanismos potenciales pueden explicar el aumento del riesgo de morbilidad materna entre las mujeres «vientres de alquiler». Estos incluyen diferencias en la salud de base o características sociodemográficas, el impacto fisiológico y psicológico asociado con llevar un embarazo para otra persona, así como los efectos de los tratamientos utilizados durante el proceso de FIV.
Implicaciones legales y sociales de los vientres de alquiler
A la luz de estos hallazgos, surgen preguntas importantes sobre la ética y la legalidad de los vientres de alquiler. En algunos países, como el Reino Unido, la subrogación es legal pero no ejecutable legalmente; es decir, una madre biológica no puede ser obligada a entregar a un niño. En Italia, la subrogación ya es ilegal, pero el parlamento ha aprobado un proyecto de ley que incrementa las sanciones para quienes participen en esta práctica, incluyendo multas elevadas y penas de prisión.
El estudio reciente proporciona evidencia sólida de que los vientres de alquiler conllevan riesgos significativos para la salud de las mujeres víctimas del negocio de los vientres de alquiler.
Estos hallazgos plantean serias preocupaciones éticas y médicas sobre la práctica de los vientres de alquiler, y subrayan la necesidad de considerar no solo los deseos de los futuros padres, sino también la salud y el bienestar de las mujeres que se ven obligadas a convertirse en vientres de alquiler
La salud y la seguridad de la mujer debe ser una prioridad, y cualquier legislación o regulación futura debe reflejar estos riesgos documentados sobre los vientres de alquiler, protegiendo a las mujeres de potenciales daños físicos y psicológicos asociados con esta nefasta práctica.