Esta martes el Consejo de Ministros ha dado su visto bueno a la reforma de la Ley del aborto que este martes aprobó el Consejo de Ministros. Esta reforma hace de España el paraíso de esta práctica.
Además, según ha informado El Debate, la norma abre la puerta al traslado forzoso del personal médico de la Sanidad pública que se declare objetor de conciencia. Un motivo más para el enfado de los colegios profesionales, que ya venían siendo muy críticos con el registro de objetores contemplado en su articulado y que no han sido consultados en la preparación de una Ley que les afecta.
Este último punto ha sido confirmado por Irene Montero, ministra de Igualdad de Podemos, al señalar que el proyecto de ley enviado al Congreso (ahora empieza el trámite parlamentario) estipula que toda solicitante tiene derecho a que se le practique el aborto en el «centro más cercano de la red pública». Puesto que la red pública, según Irene Montero, tiene que ser la «red de referencia».
«Tenemos que regular la objeción de conciencia, como ya lo hemos hecho en la Ley de eutanasia. Y, una vez sepamos quiénes son (los objetores) en la privada y en la pública, cada centro hospitalario y cada comunidad autónoma tendrá que garantizar que hay siempre personal disponible para practicarlos», explicó la titular de Igualdad. «No puede ocurrir que el ejercicio de un derecho constitucional como el derecho a la objeción de conciencia impida el acceso a otro, de más de la mitad de las mujeres, a decidir sobre nuestro propio cuerpo», añadió Montero.
A efectos prácticos, eso implica que la inscripción en el registro de objetores podrá ser motivo de traslado forzoso para los profesionales de Ginecología y Obstetricia del Sistema Nacional de Salud si en su centro no está garantizado el aborto porque todo o casi todo el personal del servicio se inscribe en el futuro registro de objetores.
NEOS denuncia la Ley del aborto
La nueva reforma impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez «supone un paso más en contra del derecho a la vida de los más indefensos y del desamparo de la mujer ante una decisión irreversible». Así lo denuncian desde NEOS, la alternativa cultural impulsada por el exministro Jaime Mayor Oreja.
Luis Peral Guerra, el coordinador del grupo de trabajo de Libertad de esta plataforma cultural, lamenta que esta reforma «va a ser bienvenida en los centros privados abortistas en los centros privados abortistas que realizan más del 78% de los abortos de España». Critica, asimismo, que tal reforma elimina el período de reflexión de tres días, así como el sobre que informa de las ayudas a la mujer embarazada, que únicamente se entregará a la mujer que lo pida. «Parece que se quiere que la entrada en caja de las clínicas abortistas no se demore tres días y que, en todo caso, ninguna mujer se eche atrás de ese magnífico negocio privado», reprocha Peral.
Asimismo, con esta modificación se permitirá a las menores de 16 y 17 años abortar sin el conocimiento de sus padres «y sin que estos puedan ayudarlas ante una decisión que en muchos casos podrá tener consecuencias psíquicas graves para el resto de sus vidas», remarca este miembro de NEOS. Denuncia también que con esta reforma se ve vulnerado el derecho constitucional de objeción de conciencia, al exigir que los médicos objetores de conciencia «se inscriban previamente y por escrito en un registro».
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